El café de un productor que conoce cada grano.

Carlos Vinasco es caficultor del resguardo indígena Cañamomo y Lomaprieta. Lleva más de una década perfeccionando el cultivo, el beneficio y la tostión profesional.

Su conocimiento ha permitido que otras fincas confíen en él para procesar su café.

Hoy comparte su propio origen con quienes valoran un café auténtico y hecho a mano.

Un café especial para cada momento

125 g — Ideal para descubrirlo

Pequeña presentación para quienes quieren probar el perfil de taza de Café Vinasco.

250 g — Presentación clásica

500 g — Para amantes del origen

Perfecta para tener buen café en casa todos los días.

Mejor precio por gramo y frescura garantizada en cada empaque.

Un territorio indígena y campesino reconocido por su biodiversidad, su tradición cafetera y su riqueza cultural.

Aquí nace Café Vinasco, entre montañas, aguas limpias y suelos fértiles que imprimen carácter a cada grano.

Cultivo consciente
Variedades tradicionales cuidadas desde la siembra con prácticas responsables.

PROCESO, CULTIVO Y BENEFICIO

Tostión hecha a mano
Carlos tuesta personalmente cada lote para asegurar frescura, balance y consistencia.

Beneficio artesanal
Fermentaciones controladas y lavado limpio para destacar el sabor natural del café.

El aroma y sabor me transportan directo a la finca, ¡un café que se siente auténtico!

Ana M.

Cada sorbo refleja el cuidado y la pasión que ponen en cada grano, simplemente delicioso.

Luis R.

★★★★★

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Trazabilidad total

Cada grano pasa por las manos de un solo productor.

Desde el cultivo hasta la tostión, todas las etapas se realizan en el resguardo Cañamomo y Lomaprieta, garantizando transparencia, frescura y un sabor auténtico.

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Lleva a casa un café con identidad.